08 ORD Y CLAS LA ADMINISTRACIÓN EN LA ORDENACIÓN Y CLASIFICACIÓN

Publicado el: 26/10/2024 / Leido: 2614 veces / Comentarios: 0 / Archivos Adjuntos: 0

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LA ADMINISTRACIÓN EN LA ORDENACIÓN Y CLASIFICACIÓN

GENERALIDADES

 

 

 

 

 

 

 

 

En todos los aspectos de nuestro trabajo, hablamos constantemente de la entidad productora, de archivos privados, formados en entidades privadas; archivos públicos, originados en entidades públicas, etc. en todas ellas, como factor común, se habla de la administración. Uno de los grandes cuerpos de conocimientos del bagaje científico de la Archivología, es la administración, es un fin primordial, desde el punto de vista archivístico, servir de memoria a la administración que genera su propia información, sin el cumplimiento de esta premisa, los archivos adquieren un sin sentido, pierden objetividad.

Corresponde entonces tomar algunos conceptos que nos permitan comprender el papel que desempeñan los archivos con relación a la administración en general.

Etimológicamente, la palabra administración proviene del vocablo latín ministrare, que significa servir, y de la preposición ad, que significa hacia. Su sentido es bastante amplio, se emplea como acción de administrar, empleo de administrador, servir para el cumplimiento de un fin, gobernar, regir, cuidar, ciencia del gobierno de un estado, equipo de gobierno de un país, o como la acción del gobierno para cuidar los intereses públicos.

La Administración es la disciplina que estudia a las organizaciones y que tiene como objetivo lograr el máximo aprovechamiento de los recursos para lograr beneficios[1].

La administración es una metodología para gobernar y dirigir las organizaciones mediante sistemas de planeamiento, ejecución y control[2].

Administración es un sistema de principios y leyes jurídicas y técnicas, con autonomía, que permiten dirigir y coordinar la actividad de un grupo humano hacia objetivos comunes[3].

El interés Archivológico por la administración radica en que esta crea y genera documentos y al mismo tiempo requiere del servicio informativo del archivo y este a su vez funciona como memoria de la institución.

Una buena administración hace posible que el Estado alcance su fin principal, que es el bien común. Y es una de las razones por la cual sus archivos, a diferencia de los particulares o privados, perduran a través del tiempo, logrando mayor continuidad y consistencia. Los archivos que son producto de la administración pública adquieren mayor importancia por su contenido histórico y por el valor informativo de los documentos, considerados como un bosque de pequeñas realidades.

Existen numerosas definiciones sobre administración, Guillermo Fernández sostiene que "la coordinación de los esfuerzos de los integrantes del grupo para lograr los fines de la institución", así como Scott y Mitchel definen "la administración es esencialmente la instrumentación humana que activa a las organizaciones y controla su curso. Los administradores infunden los valores humanos y las aptitudes administrativas que son necesarias para equilibrar la especialización y la coordinación de modo que la organización pueda realizar de manera optima los objetivos para los cuales creó".

Bernardo Kliksberg nos dice que la administración es "un conjunto de conocimientos referentes a las organizaciones integrado por nociones atinentes a la explicación científica de su comportamiento y nociones atinentes a su tecnología de conducción".

Observamos entonces que la administración se refiere a la acción de coordinar los esfuerzos y la distribución de actividades, especialización y coordinación, con el fin de lograr objetivos; toda administración esta orientada hacia el hacer.

El conocimiento científico de la organización, tiende a descubrir los comportamientos regulares y dinámica de las actividades, una de las razones esenciales en las que se marca que en toda planificación por insignificante que sea, debe incluirse la capacitación del personal, sobre todo de archivo, que es bastante ignorado, y por otro lado la actualización de conocimientos cuando existen profesionales en el área.

Jorge Hermida nos dice que "la administración es una ciencia que tiene un objeto de estudio que son las organizaciones, que trata de lograr su explicación y comprensión y la búsqueda de sus porqué. También existe una técnica de la administración, que cuentan con un instrumental conformado por reglas, normas y procedimientos que permiten conducir una organización, hacer operativo su comportamiento y transformar su realidad".

Schellemberg asigna los fines del archivo con relación al gobierno y a su administración como:

fines oficiales: son los servicios que presta el gobierno, como memoria de un Estado, como preservador del patrimonio, y como elemento de continuidad en los actos administrativos, antecedentes documentales, permitiendo adoptar resoluciones y resolver problemas merced a los antecedentes documentales depositados en el seno de todo gobierno. Así mismo los archivos permiten una orientación científica y no improvisada para la conducción del presente.

fines culturales: se manifiestan en relación a los elementos que son índice del grado de civilización de un país, en la medida en que un gobierno se ocupa de ellos. Estos nos hacen pensar en la obligación tanto del gobierno como de sus gobernados, de cuidar el patrimonio documental.

fines civiles: se manifiestan a través de la relación que existe entre el gobierno y gobernados, los archivos se constituyen en prueba de los derechos civiles y garantías de los individuos. Así mismo constituyen un elemento probatorio de las relaciones de gobierno entre sí y de los gobernados entre sí, creándose un juego mutuo de garantías respaldados por los documentos conservados en los archivos.

Analizamos en forma general algunos aspectos de la Administración para comprender los fines del archivo y los elementos básicos para una buena comprensión de la ordenación y la clasificación: la Administración (sobre todo en la Administración Pública) puede ser considerada desde dos puntos de vista generales:

Administración subjetiva u orgánica: considerada como un complejo de personas y cosas que tienden a una finalidad.

Administración objetiva o material: como actividad encaminada a la satisfacción de las necesidades públicas. Las herramientas y procedimientos tendentes a mejorar el funcionamiento en su conjunto, podremos agruparlos como funciones:

Planeamiento

Organización

Personal

Dirección

Control

Para una clasificación adecuada, conviene entonces aclarar las diferencias existentes entre lo que llamaría el conocimiento científico de la organización y el uso efectivo de la tecnología.

Es decir, no basta un conocimiento adecuado de la conducción y de la tecnología existente, sino también el uso eficaz que se le de. Graficamos:

ADMINISTRACIÓN

H

Estudio científico de la

Organización

H

Nociones sobre tecnología

de conducción

H

Gestión

Lo que si es necesario aclarar, que delimitamos el estudio de la administración solo en aquello que es concerniente al conocimiento del archivero, pero que no debemos olvidar que la administración es mucho más amplia en su sentido y en su contenido.

Tanto la administración como la Archivística, se encuentran abocadas a la búsqueda de principios y universalización de los que posee, de modo que exista un grado de uniformidad en el empleo de estos principios, de los que podemos señalar algunos indicadores:

1. - El principio de correlatividad de la organización, como totali­dad en que sus partes componentes se encuentran íntimamente relacionadas, donde una modificación de una de sus partes compo­nentes, afecta a la totalidad; comprendemos entonces que un mejo­ramiento de los sistemas de trámite y archivo, ha de beneficiar terminantemente sobre toda la institución. Es lamentable que muchos administradores olvidan este detalle, y permiten que se archivos se “empantanen” hasta el extremo que se convierte en un obstáculo.

2. - El Principio de Interactuación: toda institución interactúa con el medio en el cual se encuentra insertada, por lo consiguiente las circunstancias políticas, económicas y sociales afectan su desenvolvimiento.

3. - El principio de racionalidad, es aplicable también y obligatoriamente en los archivos, comprendiendo como el empleo mínimo de los recursos para la obtención de máxima calidad en los resultados.

4. - El personal administrativo debe tener alternativas para lograr su desarrollo y capacitación, sobre los temas que atañen al documento, teniendo como contrapartida al servicio que pierde calidad y eficacia.

5. - Toda institución debe avanzar en el sentido de su desarrollo y cre­cimiento mejorando permanentemente su servicio hacia los usuarios en general.

Considerando estos puntos como indicadores de principios, podemos formular entonces una mayor efectividad de la organización, tomemos los indica­dores de Richard Beckharde:

Considerando a la organización total, compuesta por sus partes e individuos, realizan su trabajo en relación con los objetivos y planes elaborados anteladamente. Los documentos han de reflejar en ese sentido su organización e instalación en el archivo.

La función es determinante de la forma como se encara los objetivos de la Clasificación.

La comunicación no debe distorsionarse bajo ningún aspecto bu­rocrático. Y debe reflejarse claramente en los documentos.

Se realizan esfuerzos por tratar situaciones conflictivas como problemas a los que pude aplicarse métodos de solución de lo gene­ral a lo particular.

Si bien no es un principio pero que debe darse en la optimización de la organización, el intercambio de ideas acerca de tareas y actividades, sobre todo de los archivos, disminuyendo los conflictos personales, y dando a conocer la importancia general de los documentos en el contexto de la institución.

Toda institución tiene dos circuitos de interacción, una interna, propia de la institución y una externa, propia de la sociedad circundante. Las labores archivistitas compensan a ambas. Y se refleja de ella en su organización.

Existen estrategias para acrecentar el valor compartido, siendo apoyado por niveles superiores, manteniendo siempre la integridad de los objetivos. Esto se refleja a través de la organización de la institución.

Toda organización se orienta creando mecanismos de retro alimentación de información para asimilar experiencias pasadas.

Tenemos la misma situación con el término Institución, referido a los órganos constitucionales del poder soberano de una nación; se emplea también como sinónimo de entidad, organismo, ente, etc.; pero su concepto en la actualidad es muy amplio, generalmente se conceptúa al conjunto de reglas, fijados a una determinada sociedad, en el campo sociológico, se puede considerar a la institución el reconocimiento del acuerdo social, consolidado por leyes propias, es decir, producidas en las condiciones de quienes pueden producirlas y actualizarlas.

En cada institución participan personas que provienen de una realidad socio - cultural transmitida posteriormente en las costumbres institucionales y plasmadas en cierta forma sobre los documentos, que se convierten en portadores de significación propia, manifestando su vivencia de la realidad. No es solo tecnicismo el ordenar y clasificar los documentos, sino una comprensión mas acertada de la importancia de los documentos.

Toda institución se encuentra inserta en una realidad socio - institucional mas amplia, donde existen otras instituciones, con las cuales se producen relaciones características del medio. El intercambio de información optimizada permite una mayor comprensión de la administración y del comportamiento de la información.

Las actividades humanas, caracterizándose como propia del hombre, tienden a ritualizarse e institucionalizarse; aportando esa realidad a una cada vez mas compleja, recibiendo de las demás contenidos significativos.

Durkheim considera a las instituciones como cosas, donde la Sociología tiene que constatar las leyes que regulan el comportamiento, las convenciones específicas. La dinámica está condicionada por el devenir histórico.

En la búsqueda permanente de responder a los requerimientos del acontecer, imperativo de actualidad y apertura al futuro, la institución contextúa la realidad. Generando las condiciones de constituirse en espacio vital de encuentro humano,

  • Constituirse en un agente de transformación de la realidad,
  • Definir el sentido institucional como servicio a la institución.

Administrar, al decir de Herbert Simon, se conceptúa a grosso modo como el arte de conseguir que se hagan las cosas. Lo que nos induce a:

Elección o decisión de lo que se ha de hacer.

Generar normas de coordinación en las actividades que se desarrollan por un grupo de personas.

Dilucidar métodos y procedimientos encaminados a lograr una acción eficiente.

Esta actividad es la sumatoria de decidir y hacer, desde el punto de vista de la Teoría de la Toma de Decisiones. Pero debemos decir que por Administración no sólo se reconoce una actividad, sino también a aquella ciencia social que estudia la transformación y cambio de las organizaciones para el logro de sus fines en forma eficiente; y por último también Administración suele denominarse a un cargo jerárquico dentro de la estructura organizativa de una institución.

Desde el punto de vista archivístico, analizamos en primer lugar a la Ciencia Administrativa; su evolución y sus escuelas; luego abordamos el estudio de la actividad administrativa y sus funciones, de donde establecemos los aspectos principales de la clasificación, para finalmente al tratar la Teoría de la Organización, así podemos comprender cómo se desenvuelve la Información dentro de una estructura organizativa.

La administración en sentido orgánico: está conformada por los órganos públicos existentes, partiendo de la división de poderes, formulada por Montesquieu, que delimita al estado en tres poderes públicos que se garantizan recíprocamente, garantizando la libertad ciudadana. El poder Ejecutivo fue el que mayormente desarrolló la administración, por lo que subordina al Estado por un conjunto amplio de servicios al bien común.

En sentido subjetivo u orgánico, se entiende también a los entes dotados de personería jurídica existentes en toda la sociedad organizada al amparo del estado que tiene por finalidad la satisfacción de las necesidades colectivas. Estos entes constituyen la llamada Administración Indirecta, que se subdividen en dos clases diferentes:

Administración indirecta de carácter total o territorial, como dice su nombre, el territorio es un elemento indispensable para su existencia, tomando la característica de Total por cuanto persiguen la necesidad de satisfacción de la multiplicidad de necesidades públicas de la colectividad. Esta administración se hace más patente en los gobiernos federales, compuestos de administraciones locales como son las provinciales, municipales, de comunas, etc.

Administración indirecta de carácter no territorial, persigue la satisfacción de necesidades concretas y determinadas, esta forma de administración es llamada administración institucional.

Administración en el sentido objetivo: Considerada como el conjunto de actividades realizadas por el estado dentro de una sociedad políticamente organizada, el concepto de administración surgirá de acuerdo con los fines que se establece el gobierno. Algunas particularidades se pueden observar:

-La administración objetiva es una actividad compartida con el estado, esto no quiere decir que la administración sea independiente con el estado, sino en cuanto a actividad cumplen funciones de bien público.

- Establece su carácter de subordinación a la función legislativa y política.

- La administración objetiva tiene un sentido concreto y es de carácter continuo y sin interrupción.

- La administración objetiva tiene por finalidad satisfacer necesidades públicas que no pueden ser cumplidas por particulares.

- La administración objetiva fundamentalmente actúa a través de los servicios públicos.

- La función de la administración no es un fin en sí misma, sino un medio para el logro de objetivos del bien público.

Veamos que sucede con los archivos con relación a las actividades administrativas.

En cuanto a la administración en sentido orgánico, los tres poderes generan documentos.

En la administración de carácter total, los archivos persiguen la satisfacción de necesidades colectivas, sentidas a través del requerimiento de información y de la administración correcta de los documentos que prestan las instituciones y secciones de archivos, persiguen cubrir las necesidades concretas y determinadas.

En cuanto a la administración objetiva, el archivo es una actividad dentro de una sociedad políticamente organizada, compartida con el estado y el servicio del Estado.

En los países federales, cada unidad territorial adquiere una legislación propia pero sin rebasar el marco general del estado.

En la administración no territorial, los servicios que prestan las instituciones y secciones de archivos, persiguen cubrir las necesidades concretas y determinadas.

La función archivística tiene un carácter de subordinación a la legislación, política y a la función administrativa, lo que la diferencia completamente de la bibliotecología.

Las actividades archivísticas tienen un sentido concreto, de carácter continuo, y sin interrupciones. Así observamos que en la administración desaparecen algunos sectores de actividad que generan documentos, pero el archivo continúa sus funciones mientras la administración perdura, y con buen criterio, sobrevive a la Institución, prestando servicios continuamente.

La función archivística como entidad pública, tiene como objetivos satisfacer necesidades concretas que no pueden ser cumplidas por particulares, por el mismo hecho que su contenido corresponde a las actividades públicas.

La función archivística no es un fin en sí misma, sino un medio para el logro de objetivos de bien público.

 

LAS ACTIVIDADES

 

Las actividades que desarrolla la Administración, que son de interés para los archivos para el logro de sus fines, se pueden clasificar en pocos grupos. Recíprocamente, ante las actividades de la administración, se tienen las responsabilidades, sustentadas por la responsabilidad civil que tiene toda administración para con los administrados, constituyéndose en defensa de la sociedad ante el aumento creciente de poder y prerrogativas que tienen el estado y gobierno que administra.

En el aspecto administrativo, debemos tener en cuenta la agrupación de actividades que nos permita comprender mejor los objetivos de la Clasificación.

Si bien se pueden agrupar de distintas formas a las actividades, las más conocidas y experimentadas son las realizadas en torno a las funciones de la institución; este aspecto, permite a la Ordenación y Clasificación, investigación por medio, definir y explicar las finalidades de un servicio de archivos.

Se utilizan materias propias de la Archivología, necesarias en el conocimiento de quien es responsable de la administración del archivo, sobre Ordenación, Clasificación, Descripción, Conservación de los documentos, éstas técnicas permiten aclarar como y porqué se manipulan los documentos, puesto que son características propias de las necesidades de cada una de las instituciones.

Al mismo tiempo permite analizar la existencia de documentos innecesarios y la participación del archivo en la vida administrativa o es un simple depósito documental, incluye en este aspecto responder si el archivo proporciona los documentos o la información requerida.

La agrupación de actividades puede realizarse por áreas, tenemos el ejemplo que en muchas instituciones el Archivo se encuentra dividido en distintos locales y bajo distintos responsables, lo que puede afectar el trabajo de la ordenación y clasificación. Una adecuada planificación debe contemplar estas situaciones, sea mediante la centralización documental adecuada, sea mediante la categorización de un archivo responsable de todo el trabajo documental.

También puede agruparse las actividades por el tipo de usuarios, que es lo que ocurre generalmente con los archivos generales.

Hablamos de archivos generales como modelo de aquellos archivos que se componen por un archivo intermedio o administrativo, destinado a la atención de usuarios del poder ejecutivo, y por un archivo de conservación permanente, destinado a la atención de investigadores.

En la actualidad, se tiene en cuenta que los archivos no solo contienen información para los investigadores, la multiplicidad de temas que se tratan en las instituciones oficiales nos permiten hablar acertadamente de que los archivos contienen información científica, y en la actualidad, se hace más patente este tipo de investigaciones, debiendo el archivo, prepararse para este aspecto.

Otra forma de agrupar las actividades es según los procesos por medio de equipos especializados, así tenemos actividades de reprografía, fotocopias, microfilme, etc., o actividades de proceso informático, etc.

Comprendiendo las diferentes formas de agrupar las actividades, es necesario realizar un análisis antes de lanzarlo en un plan de clasificación determinado, teniendo en cuenta que en un futuro cercano, la institución puede tener acceso a determinadas tecnologías, es entonces recomendable:

1. - Emplear personas que desempeñan actividades símiles con las que se plantean en el plan.

2. - El personal debe tener interés por lo que realmente hace, aún con el riesgo de convertir a las actividades en algo rutinario.

3. - La naturaleza de las tareas deben ser claras, independientes de otros sectores de la institución.

4. - Es necesario en forma permanente realizar un control y verificación de las actividades.

Las actividades que desarrollan la administración pública y el archivo, para el logro de sus fines, se puede resumir en los siguientes grupos.

ACTIVIDADES:

De planificación

Políticas.

De decisión.

De influencia.

De información.

Operativos.

De control.

De fomento.

De servicio.

ACTIVIDADES DE PLANIFICACIÓN: Planificar consiste en predeterminar “qué” haremos, “cómo” lo haremos, “cuando” lo haremos y “donde” lo haremos. En el "qué", "cómo", “cuando”, “donde”, están considerados los elementos fundamentales de la planificación.

La planificación se sustenta en el establecimiento de objetivos y en una determinación de políticas y planes de acción para concretar con éxito los objetivos propuestos.

La fijación de objetivos. En toda organización se crean múltiples objetivos y se categorizar de acuerdo a sus prioridades, formando toda una "cadena de fines a medios".

Cada objetivo tiene características, que una vez logrado, sirve como medio para lograr un fin más amplio, convirtiéndose en un nuevo medio para lograr un nuevo objetivo, formando estructuras de categorías, condicionados todos a un logro común a la finalidad institucional.

Los objetivos son varios, pero se encuentran ordenados en forma lógica (según las jerarquías participantes). No todos los objetivos pueden optimizarse. Porque corresponden a una rutina, son objetivos que facilitan el logro de otros objetivos.

Todos los hombres y todas las organizaciones tienen recursos escasos, tales como dinero, tiempo y capacidad. Eso quiere decir que el hombre no puede lograr todos los objetivos que quiere.

ACTIVIDADES POLÍTICAS: Son aquéllas que tienden a la formulación de conductas para el logro de objetivos comunes, no se posibilita una organización que carezca de objetivos.

Determinación de políticas. Toda política es una conducta y una decisión predeterminada ante situaciones y problemas que se han de presentar en forma consuetudinaria. Al establecer una política se está dando una solución por anticipado al problema que se va a presentar en el futuro. Muchas de estas políticas se implementan con un trámite, que tiene como fin, salvaguardar valores determinados que afectan a los fines de la institución.

ACTIVIDADES DE DECISIÓN: Son aquellas que conducen a la selección de las acciones a seguir. Son las actividades más complejas, por lo que dedicaremos mayor atención a este aspecto.

Los pasos básicos para la toma de decisiones, se pueden considerar:

INFORMACIÓN: Adecuada y especifica para la buena conducción del problema. Wilensky nos aclara que "Se entiende por información (intelligence), las cuestiones, intuiciones, hipótesis y pruebas que resultan útiles para determinar una política"[4].

INTELIGENCIA: Como aptitud y calidad en la localización y es­tablecimiento de relaciones del problema y de la oportunidad para decidir.

ANÁLISIS: Como distinción y separación de los distintos problemas y examen de las distintas alternativas, determinación de las consecuencias.

SELECCIÓN: Como elección de mejores alternativas que puedan dar mayores resultados.

En las tres primeras fases, la información juega un papel trascendental, por la actualización que se tiene del problema y del comportamiento de las variables. Por lo tanto es necesario tener en cuenta que la información tiene que ser de alta calidad.

En el cuarto paso se produce la decisión, la selección que se realiza de acuerdo a criterios que responden a objetivos determinados.

La toma de decisiones es por su esencia una actividad constante del ser humano que se realiza en todos los aspectos de su vida. Las decisiones se toman en forma intuitiva, empírica y como producto de la actividad intelectiva.

DECISIONES PROGRAMADAS: Cuando la persona toma una decisión rememora una respuesta basada en la experiencia, que ha sido elaborada anterior­mente, tiene una decisión programada. Basada generalmente en:

Operacionalidad de los objetivos.

Repetibilidad de la situación.

Certidumbre de los resultados.

Toda incitación es considerada como:

Reunión de factores de producción, así en la institución encontramos recursos humanos y materiales que se combinan para alcanzar objetivos determinados. El resultado de las decisiones que se toma respecto a las alternativas presentadas, se trasluce en la eficiencia de la utilización de los recursos disponibles.

Naturaleza y trabajo bajo una organización o dirección para prosecución de determinadas satisfacciones, en toda Institución existe una dirección que integra los diferentes recursos, dirige, coordina y controla para el logro del fin propuesto.

Servicios que la institución requiere. La actividad de la Institución crece en complejidad aumentando la presión competitiva y requerimientos legales o de otro orden que impone el cuerpo so­cial. La dirección de actividad empírica, pasa a ser una técnica compleja, involucrando especialidades en diferentes aspectos.

Es la calidad la que condiciona o determina la cualidad de los resultados y permite una gestión satisfactoria de la administración.

En las instituciones pequeñas las decisiones se encuentran generalmente centralizadas en un individuo; en las Instituciones grandes hablamos de la resultante de las decisiones del conjunto de individuos que tienen facultades para tal efecto, situación que da origen a la aplicación de técnicas de comunicación para lograr la coordinación.

El elemento humano dentro de la Institución se reparte las tareas a realizar por grupos homogéneos que constituyen funciones y se establecen diferentes niveles o jerarquías para los efectos de poder actuar en forma eficiente.

La naturaleza de la actividad de las personas en los diferentes niveles, varía en cuanto a la proporción que dedican a labores de planificación, supervisión y control y ejecución de tareas concretas como manejo recursos materiales.

En la medida que ascienden los niveles de la pirámide organizacional, las decisiones varían en cuanto a su naturaleza, alcance e importancia respecto a los fines de la empresa. Este aspecto es esencial para la clasificación y la selección de los documentos producidos en cada nivel.

El planificador de los sistemas de gestión y archivos debe tener en cuenta el cuestionario:

¿Qué se hace en la institución?

¿Qué se hace para que los niveles de ejecución puedan tomar mejores decisiones?

¿Es todo lo que puede hacer el archivo?

Cuando hablamos de las actividades políticas, normalmente se habla de dos tipos de decisiones:

- Decisiones de rutina.

- Decisiones de política.

Decisiones de rutina: Son las mas frecuentes y repetitivas, no afectan considerablemente la suerte de la organización. Generan documentos de carácter facilitativo. Estas decisiones se toman en cualquier nivel de la institución.

Decisiones de política: Son las que toman, los niveles específicos para este fin, son de trascendencia para la organización. Generan documentos sustantivos, que hacen a la vida de la institución. Algunas decisiones de política se transforman en decisiones de rutina, estableciéndose el procedimiento para adecuar determinadas situaciones que se presentaran en el futuro.

Así como existen categorías en los objetivos, en las políticas empresariales existen los estratos jerárquicos.

ACTIVIDADES DE INFLUENCIA: Son las actividades que un determinado sector institucional afecte el comportamiento de otro. Aparecen variables humanas de poder y orientación.

El poder de la persona puede ser:

Normativo: Como conjunto de reglas que se otorga, bajo algunos requisitos constituidos y regulados por la legislación y reglamenta­ción de la institución.

Remunerativo: Otorgado como contrato o convenio, sobre la base del intercambio de la institución hacia el individuo.

Coercitivo: Otorgado mediante el uso de medidas contención, re­tención, presión sobre el individuo.

ACTIVIDADES DE INFORMACIÓN: Referido a la obtención de los elementos de juicio necesarios para toda decisión y comunicación.

 Los Archivos se fundamentan por la necesidad del trabajo administrativo, que cumple su ejercicio en base a la información. Se distinguen algunas categorizaciones como:

Dato: Documento, testimonio, necesario para llegar al conocimiento o relación con el hecho.

Registro: dato compilado sobre determinado soporte.

Información propiamente dicha: dato asentado, procesado y apto para ser utilizado.

La información para ser comprendida en su totalidad tiene algunas cualidades:

Claridad: En cuanto su exposición tiene que ser com­prensible, inteligible para el utilizador.

Oportunidad: Por la inmediatez de su recuperación.

Seguridad: De modo que utilizando la misma información en circunstancias símiles, se obtengan resultados semejantes cuando no iguales.

Validez: La información debe representar la realidad. Comprende en si misma:

Lógica coherente de los datos,

Conformidad con los documentos resguardados,

Conformidad con los conocimientos adquiridos,

Capacidad de predicción.

Adecuación: la información debe ser acorde con los hechos y la realidad y representar en sus datos esa evidencia.

Precisión de alcance: La información debe ser acorde con los objetivos de su necesidad.[5]

El nivel ejecutivo es el centro del sistema de comunicaciones. Recibe informes, integra datos y toma decisiones sobre la base de la información suministrada.

La información es necesaria entonces para:

Determinación de objetivos,

Control,

Innovación.

Concluimos:

Toda decisión requiere información.

El ejecutivo depende de los subordinados y de la información para el logro de sus objetivos.

Los archivos seleccionan y transmiten información relevante.

ACTIVIDADES OPERATIVAS: Considerada como una de las mas comple­jas por la enorme variedad de acciones y actos que requiere para el logro de los objetivos de la institución. Es la columna vertebral de toda entidad, al desarrollarse todo el trabajo que sustenta la razón de ser de cada servicio institucional.

ACTIVIDADES DE CONTROL; denominadas también de gobierno, de policía; son aquellas actividades que despliega en el ejercicio de sus potestades para garantizar la paz social y el orden público. El archivo, si bien no es una actividad de policía pero sí, efectúa un control sobre la documentación producida por la Institución de acuerdo con su jurisdicción otorgada.

Es una de las funciones de dirección, por lo que el ejercicio del mando implica el control. H. Fayol decía que "el control consiste en verificar si todo está de acuerdo con el plan adoptado, las instrucciones cursadas y los principios establecidos. Tiene por objeto poner en manifiesto debilidades y errores al objeto de rectificarlos y evitar que se repitan. Actúa sobre todo: cosas, personas y acciones".

En los procesos administrativos existen proyectos, planes, programas, objetivos y metas, que no pueden ser llevadas a cabo por una sola persona, para tal efecto, existen principios de delegación de funciones; conforme a los criterios de la división de trabajo, se asignan deberes y responsabilidades en cada una de las unidades de la institución. Son factores que nos permiten comprender como debemos efectuar la clasificación.

El control debe revisar en forma periódica y permanente, el cumplimiento de los planes, de las funciones delegadas y los deberes y responsabilidades. Esto nos permite verificar y realizar ajustes o correctivos.

Los procesos de control pueden clasificarse de la siguiente forma:

Control formal: Se ejerce para verificar si las actuaciones de la institución se encuadran en las disposiciones legales, reglamentos y regulaciones en general; se enfatiza los procedimientos o de forma, más que de las cuestiones de fondo.

Esta clase de control, en el ámbito de la administración pública, está regulado por disposiciones del derecho en general, del derecho público, constitucional y administrativo, además de los reglamentos internos. Estos controles pueden ser ejercidos por unidades internas o externas de la propia institución.

Control de gestión: Constituye un tipo de control técnico sobre las acciones emergentes de los objetivos y metas previstas en un plan. Este tipo de control se da generalmente en unidades de planificación, o en oficinas responsables de la aplicación de métodos de control de gestión. Estas unidades recogen información de las unidades ejecutoras y operativas, con el fin de verificar lo.

Control por Retroalimentación: Una característica esencial de cualquier sistema es que su diseño refleja el esfuerzo de controlar y regular las interrelaciones de sus elementos componentes.

Se utilizan los términos "realimentación" (feedback) y "control de realimentación" (feedback control) para expresar los aspectos reguladores de los sistemas.

Un sistema puede diseñarse como de "control por circuito abierto" o " control por circuito cerrado".

Un sistema de control de circuito abierto no ofrece el control riguroso provisto por el circuito cerrado. Un sistema de circuito cerrado, por otra parte realiza todo esto.

ACTIVIDADES DE FOMENTO: que tienen por finalidad promover las actividades particulares que satisfacen las necesidades públicas o son de utilidad general. En los archivos se plantean los aspectos económicos, sobre costos de la información, costos de mantenimiento de los documentos, conservación, restauración, etc., con los consiguientes beneficios de fomento en cuanto a los objetivos de investigación y educación.

ACTIVIDADES DE SERVICIO: destinada a proporcionar utilidad a particulares, condicionada a razones de interés público. En la mayoría de los países desarrollados existe una estrecha relación entre archivos, investigadores y los educandos.

Al hablar de actividades de servicio público, el archivo se consustancia fácilmente al comprender que sus funciones, ante todo, constituyen un servicio a la institución, por cuanto encierra el patrimonio de la sociedad que lo genera.

Recíprocamente, ante las actividades de la administración, se tienen las responsabilidades, basado propiamente en la responsabilidad civil que tiene toda administración pública para con los administrados, constituyendo en una defensa de estos últimos ante el aumento creciente de poder y prerro­gativas que tienen la institución y gobierno que administra.

ACTIVIDADES DE COORDINACIÓN: Esta función se encuentra en todas las etapas del ciclo administrativo. Es una orientación de los recursos y esfuerzos, unificados a un propósito o finalidad específica. Para lograr una coordinación eficiente es necesario prestar atención a la comunicación.

Sistema de comunicación: La comunicación obedece a una decisión traducida a un mensaje legible en el marco de un determinado ambiente. El mensaje es codificado convencionalmente, evitando errores de interpretación.

Para transmitir un mensaje, se requiere un elemento transmisor o de emisión, un canal y un receptor. Si no se usa un código uniforme puede llegar a variar la acción por un problema semántico en interpretación del mensaje.

 

 

 

 

 

 

 

IDENTIFICACIÓN DE LOS FONDOS DOCUMENTALES

 

 

 

 

 

La investigación archivística se ha convertido una realidad a partir de la sistematización de las tareas documentales, estas se complementaron como profesión, apoyadas por la Universidad en general, que otorga su respaldo científico y doctrinal necesario para establecerse definitivamente como Ciencia.

Los trabajos realizados hasta la fecha nos lleva a considerar una metodología archivística que permite el tratamiento universal de los fondos documentales desde su creación, hasta su depósito definitivo en los archivos de conservación permanente.

APROXIMACIÓN A UNA METODOLOGÍA ARCHIVÍSTICA

Entendemos por método, al orden que se sigue en el conocimiento metódico, para hallar la verdad y enseñarla, es una forma de obrar o de hacer una cosa, lo cual da pie para considerarla como el conjunto de acciones o de procedimientos más adecuados para alcanzar objetivos Determinados. El método, en su modo genérico, deriva del griego méthodos, búsqueda, investigación, palabra compuesta por metá hacia, y odós, vía, camino; según la etimología entonces, es el camino que debe ser recorrido para llegar a un punto o resultado, o modo de hacer una cosa.

En general, es la manera de proceder racional para lograr un fin determinado, no sólo escogiendo los medios convenientes, sino también poniéndolos en práctica según un orden razonado, adecuado y consecuente, que se expresa mediante reglas o normas que pueden ser principios. Este párrafo habla perfectamente del papel de la Ordenación y de la Clasificación en el campo de la Archivología, por la cual podemos considerarla perfectamente como un método, debido a su proceder racional, utilizando principios adecuados para lograr un orden adecuado de la información.

El fin u objetivo que se quiere obtener, mediante un método, no ha de ser necesariamente científico, pero una de las características fundamentales del conocimiento científico es que se trata de un conocimiento metodológico. Por lo general, los métodos se aplican a actividades susceptibles de ser divididas en etapas o momentos diversificables.

Método y racionalidad se hallan estrechamente interrelacionados, por cuanto todo método es una manera de aplicar la racionalidad, pero a su vez la racionalidad misma puede definirse como el método de justificar adecuadamente nuestras creencias, para evitar lo más posible los errores, si se trata de la racionalidad teórica, o de adoptar los medios adecuados a los fines perseguidos, si se trata de la racionalidad práctica. La cuestión fundamental que plantea todo método es que no se trata simplemente de una manera útil y razonable de averiguar o conseguir algo, sino que el hecho de adoptar un método concreto determina ya aquello mismo que puede averiguarse o conseguirse. Del método hay que decir lo mismo que se afirma del conocimiento en general: que modifica aquello mismo que intenta conocerse.

En algunas corrientes filosóficas y en determinados autores particulares, el método se manifiesta parte sustancial de su sistema. Así, el método socrático es, no sólo de núcleo de la actividad filosófica de Sócrates, sino hasta inicio de la filosofía occidental; la duda metódica se identifica con el pensamiento de Descartes; el método trascendental de Kant no es sino el contenido de su Crítica de la razón pura; el método dialéctico es la marca de identidad del idealismo de Hegel y de la interpretación de la vida humana de Marx; el método fenomenológico caracteriza igualmente a la filosofía de Husserl y al existencialismo de Sartre. La actual filosofía de la ciencia, superadas de algún modo muchas de las anteriores discusiones sobre el método científico, pone de relieve el pluralismo de los métodos empleados en las diversas ciencias.

En cambio la metodología se refiere al conocimiento de procedimientos e instrumentos. Así la metodología Archivística se compone de los procedimientos (métodos), Ordenación y Clasificación, Descripción y Selección, sean estos de mera apreciación lógica como técnica o práctica, pero perfectibles en base a principios cuyos enunciados se caracterizan por su aceptación universal. La ciencia Archivística emplea, al igual que todas las ciencias, los métodos lógicos básicos: deductivo, (Ordenación y Clasificación para dar un ejemplo) inductivo (descripción por ejemplo) y analógico (Ciclo Vital de los Documentos) y sus derivados el analítico (caracteres de lo documentos) y el sintético (Selección), que conforman todo proceso de razonamiento.

La teoría archivística elabora y manifiesta los marcos conceptuales, las formulaciones, los análisis epistemológicos cuando los hay, las reglas convenidas o normalizadas, para el tratamiento de las hipótesis, las explicaciones conceptuales mediante elaboración de una terminología común y apropiada a los conocimientos que se practican. La práctica, origen de todos saberes, proporciona la experiencia sobre la cual actúa el análisis riguroso y aplica normas que surgen, como resultado de las especulaciones teóricas.

Entendemos por metodología, en general, la ciencia del método, o el estudio teórico de los métodos que se usan en las diversas ciencias. Más propiamente, no sobre el objeto que tratamos, sino sobre el modo como tratamos a este objeto, y sobre los procedimientos de la investigación científica. Se la ha considerado parte de la lógica o de la epistemología; en realidad se aproxima mucho a esta última, así como a la filosofía de la ciencia o a la teoría de la ciencia, pero puede distinguirse de ellas por un enfoque más centrado sobre las técnicas y los procedimientos de investigación que sobre los problemas lógicos y epistemológicos.

Se discute acerca de la metodología propia de las ciencias sociales, ciencias históricas, o ciencias del espíritu en general: según algunos, les incumbe un método que las distinga de las ciencias empíricas tradicionales, y según otros el método ha de ser para toda ciencia el mismo. Esto forma parte de una disputa más amplia, la denominada Methodenstreit (controversia sobre los métodos), surgida primeramente a finales del siglo XIX, en Alemania, entre ciencias de la naturaleza y ciencias del espíritu; Dilthey sostuvo el carácter propio y diferencial de estas últimas, que debían recurrir a métodos históricos, sobre todo la comprensión y la hermenéutica. La polémica se reanudó en los años sesenta, también en Alemania, entre Popper y Adorno, y otros. Popper sostenía la idea positivista de la «unidad del método» entre las ciencias sociales y naturales o de la «teoría unificada del método» que enuncia que toda ciencia ha de fundamentarse en la crítica de teorías o en la refutación de conjeturas.

Mientras que la escuela de Francfort, o los autores de la teoría crítica sostenían la peculiaridad del método de las ciencias sociales: el método depende también de la «cosa» a la que se aplica y, si ésta es la sociedad, ha de comprender, entre otras peculiaridades, la experiencia de sus contradicciones y su carácter de totalidad; por tanto, el método no puede ser el mismo que el de las ciencias de la naturaleza.

Metodología enfocada a la acción archivística. Se aplica al quehacer de las prácticas archivísticas, sea para establecer formas o diseñar secuencias para obtener el conocimiento del hecho archivístico, o para alcanzar resultados.

La metodología de la acción, del acto, o del acto proyectual[6] está destinada a formular planes en el quehacer archivístico, sea para el conocimiento de las estructuras organizativas en sí, o como un hecho archivístico propio de su acervo; sean estos de hechos, sucesos, procesos o fenómenos, que suceden en su interior. No por ello debemos ignorar de los hechos que acontecen en su contexto de actuación con una finalidad más que explicativa, descriptiva; o, en última instancia, para llevar a cabo el logro de objetivos o resultados inherentes al quehacer de la dirección y del gobierno.

El método hipotético-deductivo es aplicable al conocimiento que se ocupa del mundo social. Parte de la concepción de Karl B. Popper, que enuncia que “las ciencias empíricas son sistemas de teorías”. Esas teorías surgen de la experiencia, tal como lo anunciáramos en el libro anterior de Teoría, “Las necesidades, una vez manifiestas y expuestas, son las que determinan los principios y las prácticas, doctrinarias o disciplinarias inicialmente, científicas posteriormente, creando técnicas que pasan por las largas fases de elaboración en los diferentes medios que se desarrollan, recibiendo métodos nuevos, concebidos para almacenar conocimientos y que requieren ser estudiados minuciosamente”[7] estos conocimientos son aceptados no por un mero capricho ni simpatías, sino porque no existe una confrontación con la realidad que las desmienta.

Las hipótesis se sustentan en la formación de cadenas deductiva y van conformando teorías explicativas de la realidad.

 

PRECISIÓN DE CONCEPTOS.

Hipótesis: Se lo estudia en epistemología, proviene del griego hypóthesis, del verbo hypotíthemi, poner debajo: propuesta, suposición. Es una suposición, o un supuesto, con miras a explicar algo. Referida a la ciencia, es una generalización o enunciado general que, en principio, supone una interpretación de determinados hechos, y que adoptamos transitoriamente como verdadera mientras la sometemos a confirmación o refutación. En expresión de Carl G. Hempel, son «conjeturas felices» sobre las conexiones que se establecen entre los fenómenos que estudiamos.

No toda hipótesis científica es una generalización: hay hipótesis particulares, como lo fue en su día «la Tierra gira en torno al Sol», o la del descubrimiento del planeta Neptuno por las irregularidades en la órbita de Urano. No siempre queda clara la distinción entre una hipótesis y una teoría o una ley y, dado que la finalidad de una hipótesis es patrocinar una investigación, el mejor modo de entenderla es situándola en el contexto global de las teorías científicas. Una teoría es una recapitulación de varias leyes en forma de conjunto de enunciados que mantienen unas determinadas relaciones lógicas de deducibilidad; una ley es una hipótesis que, sometida a contrastación, ha sido confirmada; una hipótesis es una explicación transitoria con la que se trabaja en espera de someterla a contrastación; un enunciado de observación -o enunciado protocolario- es el enunciado que describe una experiencia, del cual puede probarse que es verdadero o falso. Se verifica una hipótesis, derivando de ella consecuencias lógicas -esto es, enunciados de observación o protocolarios- que, puestas a prueba, confirman inductivamente la hipótesis, en caso de resultar verdaderos, o refutan la hipótesis, en caso de resultar falsos.

El falsacionismo de Popper plantea su propia manera de entender la formulación y la contrastación de hipótesis[8]. Para facilitar los conceptos, consideremos a todo enunciado que se adopta como verdadero con el fin de analizar sus consecuencias hasta aceptarlo como premisa, suposición o un presupuesto fenomenológico o desecharlo como opuesto a la realidad.

Teoría: derivado del griego, theoria, que significa ceremonia religiosa o contemplación. En sentido amplio, es el enunciado que aporta un conocimiento que está más allá de los datos o hechos que se perciben de una forma inmediata; conjetura o hipótesis meramente especulativa que nada tiene que ver con la práctica, con la observación o con la verificación; también campo amplio de estudio, filosófico o no, como la «teoría de las ideas de Platón», la «teoría de la sociedad» o la «teoría del conocimiento». El sentido etimológico del término está presente en los grandes autores de la antigüedad, como Platón y Aristóteles, quienes entienden el conocimiento en general, respectivamente, como contemplación de las ideas o como saber contemplativo y actividad intelectual superior del hombre. Con la presencia, en la época moderna, de las ciencias empíricas, una teoría es preferentemente una teoría científica, o sea, un conjunto de enunciados, hipótesis y leyes sobre un aspecto de la realidad, que establecen entre sí relaciones de deducibilidad y cuyas últimas afirmaciones son enunciados de observación, y cuyo concepto se relaciona intrínsecamente con los de ley e hipótesis. Sin embargo, las teorías no se limitan al ámbito de las ciencias empíricas, sino que abarcan cualquier campo del saber y debe decirse que, en principio, todo el conocimiento humano es teórico, porque todo conocimiento va más allá de los simples hechos conocidos en un momento dado; también hay teorías puramente lógicas o matemáticas. La teoría es al aspecto sustancial del conocimiento, tanto del científico como del no científico. En la ciencia actual el interés se centra en las teorías, y no en la experiencia por sí misma, o en los datos o las observaciones; datos y observaciones se obtienen en función de la teoría, y aun todo dato se considera que lleva una «carga de teoría». Popper ha contribuido de un modo en especial, en particular con su obra La lógica de la investigación científica (1934), a que últimamente se haya dado una importancia peculiar a la teoría en la metodología de las ciencias: las ciencias son sistemas de teorías y la misma epistemología es el estudio de las teorías. De aquí que la filosofía de la ciencia, o teoría del conocimiento científico, sea una reflexión de segundo grado, no ya sobre hechos ni siquiera sobre generalizaciones de hechos, sino sobre teorías, que Popper interpreta como un sistema de conjeturas y refutaciones: redes de mallas cada vez más finas, con las que se intenta captar, comprender y dominar la realidad[9].

Entre los requisitos que debe satisfacer la teoría se cuentan:

1) debe tener consistencia lógica; no debe existir en sus enunciados hipótesis contradictorias;

2) las hipótesis fundamentales o principios deben ser independientes, es decir, ninguna de ellas debe ser deducida a partir de las demás;

3) no debe contener hipótesis inescrutables.

La teoría se constituye entonces por una serie de hipótesis hilvanadas a una realidad. Existe toda una clasificación de las hipótesis  que no hacen a nuestro estudio, en forma resumida podemos observar:

Las Hipótesis fundamentales; consideradas de un alto nivel del conocimientos, como Hipótesis madres, de la cual derivan gran parte del resto de las Hipótesis de un determinado conocimiento. Las Hipótesis fundamentales son opuestas a las de nivel mínimo que son generalizaciones inmediatas; y entre ambas opuestas se consideran las Hipótesis de nivel medio. Está también las Hipótesis extremales: Suponen que distintos elementos externos al fenómeno analizado, podrían incidir sobre él si permanecen constantes; están también las Hipótesis inescrutables: son de tal naturaleza que las consecuencias que se deducen de la teoría considerándolas, igual serian deducibles de ella sin su existencia. Es decir que son superfluas. Un sistema teórico genuino no debe contenerlas; y las Hipótesis ad hoc: pertenecen a la teoría. Se agregan para explicar un resultado.

Leyes: se admite en general que son hipótesis de alto nivel, con mucho poder refutativo y con poder predictivo. Provienes del vocablo latino lex, legis, ley o proyecto de ley, que a su vez viene de legere, reunir, escoger y también leer; en griego, nomos. En sus diversos sentidos, se refiere fundamentalmente al ámbito jurídico, moral y científico.

Nos interesa el aspecto científico que con frecuencia equivale a una ley de la naturaleza, es la descripción contrastada de las regularidades que se observan en los fenómenos naturales. Las leyes científicas o de la naturaleza, se expresan mediante enunciados descriptivos, con los que se señala simplemente lo que es o sucede; estas leyes expresan necesidad y universalidad. Las leyes de la naturaleza, son de cumplimiento y observancia necesarios y universales.

Operativa del método.

Para lograr una aplicación adecuada del método hipotético-deductivo podríamos señalar tres pasos importantes:

1) Formulación de las hipótesis iniciales: Estas devienen  de la experiencia, y de la repetición de los hechos;

2) Deducción de nuevos enunciados: De nivel prácticamente básico y como consecuencia de las hipótesis iniciales;

3) Control; que permite analizar los enunciados, comparados con la experiencia y obtención de nuevas conclusiones.

Debemos tomar en cuenta, en forma general que la operativa del método hipotético-deductivo, como cualquier método científico, correctamente expresado, y sobre todo, evitando un autoritarismo del conocimiento, no acepta la existencia de principios absolutos. Asi los principios de la archivística, que son sugeridos por la práctica, deben soportar la prueba de la experiencia. Pero, aún asi, tendrán siempre un  carácter provisorio.

Dada esta situación, los elementos de prueba empíricos, en sí,  establecen la hipótesis, consustanciados en si mismo, la hipótesis es una consecuencia lógica de los elementos de prueba, por lo que ninguna hipótesis es probada por sus casos favorables. Esto significa que los elementos de prueba empíricos hacen que sea razonable aceptar la hipótesis, sobre todo cuando no existen casos contrarios conocidos que prueben que una hipótesis es falsa o se la pueda refutar.

El método hipotético-deductivo plantea una impugnación directa a la licitud de la inducción como procedimiento de la ciencia. Si bien es comprensible, lo forzado que implica aceptar este método, no debe por ello amilanarnos sobre el objetivo principal del trabajo archivístico, existen rutinas, las rutinas conforman métodos, no siempre nomológicos, sino más bien de experiencia, y todo lo que atañe a las ciencias sociales son conocimientos acontecidos o de experiencia, así nos plantea Popper, cuando plantea que “no se justifica la inferencia de enunciados universales a partir de enunciados singulares, por más numerosos que éstos sean”; lo mismo que nos dice Wisdom: “La inducción no existe como método, por cuanto no hay un mecanismo racional para pasar de premisas observacionales a una generalización inductiva”.

Entendemos entonces, de acuerdo a lo expuesto por los autores anteriormente, que cualquiera que fuere el número de experiencias observadas respecto a una determinada relación causal, no es óbice de ser cierta, porque pueden llegar a darse experiencias contrarias, esto nos obliga a pensar que las conclusiones validas para un número indeterminado  de experiencias solo son relativas. Lo que quiere decir que la verificación de la hipótesis se limita a las conclusiones extraídas de conjuntos de experiencias observadas, considerando que tampoco ningún número de observaciones permiten dar por verificada una hipótesis, por cuanto pueden producirse siempre observaciones que la refuten.

La ciencia archivística consta de un conjunto de teorías que pretenden explicar distintos aspectos del comportamiento de los documentos de distinta naturaleza y origen.

Existen algunas pautas de aplicación del método hipotético-deductivo sobre el fenómeno archivístico:

1) La obtención de datos: basado en la observación en lo que concierne a las organizaciones a quienes presta servicio;

2) La formulación de la hipótesis inicial: la deducción de hipótesis sucesivas y la elaboración definitiva de teorías explicativas del comportamiento documental;

3) El análisis metódico de las hipótesis propuestas: considerando el el comportamiento concreto de los documentos

4) La reflexión y transmisión de los conocimientos: logrados con las distintas hipótesis elaboradas y propuestas respecto a las organizaciones documentales, desde distintos enfoques como el histórico, psicológico, sociológico, etc

 

 


[1] Cota.D. Leonardo – Graciela; Administración de Empresas – 4º edición – Buenos Aires; El Ateneo, 1998 (pág. 4). (35 págs.).

 

[2] Barroso de Vega – Alicia, Liporace – Ana María; Administración de Empresas; Buenos Aires; 1992, Editorial Plus Ultra, (pág. 16). (Págs. 115).

 

[3] García – Apolinar, E. ; Administración de Empresas 4; Buenos Aires 1991; Saint Claire Editora S.R.L., (pág. 7). (Págs. totales: 145).

 

[4]WILENSKY, Harold L. Organizational....Op.Cit. p. 11.

[5]WILENSKI, Harold L., Op. Cit. p.11.

[6] Arévalo Jordán, Víctor Hugo: El Acto Proyectual de los archivos. Ed. Virtual y en papel. E-libro.net. 2002

[7] Arévalo Jordán, Víctor Hugo: Teoría, fundamentos y práctica de la Archivología. Ed. virtual y en papel. E-libro.net. 2002. pag. 138

[8] Diccionario de filosofía en CD-ROM. Copyright © 1996. Empresa Editorial Herder S.A., Barcelona. Todos los derechos reservados. ISBN 84-254-1991-3. Autores: Jordi Cortés Morató y Antoni Martínez Riu.

[9] Diccionario de filosofía en CD-ROM. Copyright © 1996. Empresa Editorial Herder S.A., Barcelona. Todos los derechos reservados. ISBN 84-254-1991-3. Autores: Jordi Cortés Morató y Antoni Martínez Riu.

Publicado el: 26/10/2024 / Leido: 2614 veces / Comentarios: 0 / Archivos Adjuntos: 0

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